El CF Talavera vuelve a ser víctima de sus propios errores y sucumbe en su visita al Nuevo Mirador

El Club de Fútbol Talavera de la Reina volvió a ser víctima de sus propios errores y saldó su visita al Nuevo Mirador de Algeciras con una nueva derrota, concretamente la octava, en un encuentro en el que el Algeciras Club de Fútbol aprovechó los ‘regalos’ del conjunto cerámico para batirle por un resultado de 2-0 y para dejarle una semana más con el casillero de victorias a cero.

Lo curioso de todo es que la historia del encuentro pudo ser muy diferente sin ese primer cuarto de hora inicial de esplendor de los hombres de Rubén Gala hubieran acertado con la que tuvieron, una doble ocasión muy clara con servicio desde la banda para un Álvaro Juan que la amortiguaba con el pecho y disparaba salvando a bocajarro Flere, el rechace de caía a Escudero y sin portero veía cómo Jordi sacaba bajo palos y desbarataba definitivamente esta doble ocasión.

Como la gaseosa, el factor sorpresa de los cerámicos, con un Souleymane muy protagonista, fue poco a poco perdiendo fuerza, lo que permitió al Algeciras ir entrando en el encuentro e ir acumulando llegadas de David Martín y Albarrán, quien llegaría a anotar pero la acción quedaría invalidada por falta previa sobre Souleymane.

No tardaría mucho en llegar el primer gol local un tanto en el que la zaga visitante pecaría un poco de falta de tensión. Sacó un centro al corazón del área Juan Serrano y Roni que se le adelantó tanto a Javi Bueno como a Parra para conseguir de remate de cabeza y en posición franca el 1-0, resultado éste con el que nos iríamos al descanso.

En la reanudación introdujo triple cambio Rubén Gala en busca de soluciones dando entrada a Frodo, Etxaburu y Giuliano y dejando de esta manera en la caseta Escudero, Souleymane y Edu Gallardo. La tuvo uno de los recién entrados, en ese caso Giuliano, pero no supo aprovechar la buena acción personal de Parra.

Y cuando parecía que los cerámicos podían enderezar el rumbo de su nave, llegó el segundo cañonazo local gestado, por cierto, en la propia sala de máquinas talaveranas. En un tanto que recuerda al encajado en Marchamalo durante pretemporada, Lolo Garrido despejaba hacia atrás un balón en un rechace a remate local y se la regalaba a Álvaro Romero para que éste batiera a Biel Ribas tras recoger un rechace a remate previo que salvó el arquero.

Era el 2-0 y la sentencia a un encuentro que encaraba sus minutos finales. Se jugó su última carta el técnico palentino dando entrada a un Bashiru que lo hizo bien en este tramo final, con varias claras, como un mano a mano ante el meta, con posterior remate errado por Frodo, y con un gol anulado por presunto fuera de juego de delantero a la hora de ejecutar el remate con el que había batido a Flere.