Situación surrealista la que se vivió en la matinal del pasado martes 31 de mayo en el Diego Mateo ‘Zarra’ de Talavera de la Reina, escenario en el que se iba a disputar la final de la Copa Federación de Castilla-La Mancha o al menos eso es lo que se creía.
Y es que el Club de Fútbol Talavera de la Reina Femenino, uno de los finalistas, iba a presentarse a la cita, como también lo iba a hacer el colegiado Alejandro Alonso Salcedo, pero faltaba la tercera parte implicada, la Escuela Municipal Féminas Fuensalida ‘B’.
Y es que al parecer el conjunto fuensalidano no estaba de acuerdo con la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha el haber otorgado al conjunto blanquiazul ser el anfitrión de la cita, al entender que ese caso les correspondía a ellas al entender que las citas se disputarían alternas (uno en casa, otro fuera…) y que en esta ocasión tocaba celebrarse en Fuensalida.
Lo cierto es que al respecto de ello esta condición no se cumplía con las talaveranas, que hay que recordar que disputaron de manera consecutiva dos citas a domicilio y la última en casa, mientras que a EMF Fuensalida ‘B’ le ocurrió todo lo contrario.
Por este hecho se determinó por parte de la FFCM que el local debía de ser para este encuentro un conjunto cerámico que sería campeón ante la incomparecencia de su rival, si bien es cierto que el recurso está en manos del Comité de Disciplina Deportiva, quien determinará en las próximas fechas.
